Deseos

María y la boda de su hija

María padecía una enfermedad en la piel que precisó que le amputaran una de sus piernas. Pasó de ser totalmente independiente en su hogar a depender de su familia para todas las actividades cotidianas de la vida diaria. Vivía sola y no quería depender de sus hijos para todo, se sentía una “carga” y eso generaba en ella mucho sufrimiento. María aprendió a manejarse en silla de ruedas por su domicilio y a realizar su autocuidado sola; incluso cocinaba.

Pero la enfermedad avanzaba y un sangrado abundante por la úlcera que tenía en su pierna la obligó a permanecer en la unidad de cuidados paliativos de Huelva hasta el final de sus días. Maria intuía que no le quedaba mucho tiempo. Su hija se casaba en unas semanas y le había prometido ser su madrina de boda. Durante su ingreso, todo el equipo sanitario que la atendía se organizó para que Maria pudiera tener controlados los síntomas y pudiera acudir en silla de ruedas a la boda de su hija. Pudo recibir la visita de la peluquera y maquilladora, se pudo vestir de madrina, obtuvo el permiso para salir del hospital el tiempo que necesitó para acompañar a su hija y disfrutar de la ceremonia por unas horas. María volvió a su habitación de hospital relatando que fue inmensamente feliz. Falleció una semana después, acompañada por toda su familia.

Paco y la Navidad

Paco, ingresado en la unidad de cuidados paliativos de Huelva, permanece solo la mayor parte del tiempo por dificultad de su familia para acompañarle. En este caso, es el personal de enfermería quien suple el acompañamiento y apoyo físico, emocional y espiritual. A causa de su estado, no tiene fuerzas para levantarse de la cama y realizar por sí mismo sus cuidados. Su sueño y su deseo es tan sencillo como poder salir de su habitación y caminar unos pasos por el pasillo, con ayuda de las muletas y acompañado, para ver el portal de Belén y el árbol de navidad. El día que lo consiguió, con el apoyo del equipo sanitario de la planta, pudo cantar villancicos con un coro que le visitó. Cumplió su deseo y eso le proporcionó una gran alegría.

La boda de Álex y Blanca

La boda de Álex y Blanca: un sueño cumplido para decirle adiós a la vida por todo lo alto.

Con dos décadas de convivencia y tres hijas a la espalda, esta pareja no va a permitir que el cáncer también les arrebate su gran ilusión. ”Es nuestra oportunidad, hay que vivirlo”

https://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2017-07-01/cuidados-paliativos-boda-sueno-cumplido-fin-de-vida_1408019/