¿Qué nos sostiene en momentos de adversidad o de crisis como son la enfermedad o el fin de nuestros días? La persona es un ser complejo en el cual concurren diferentes aspectos a los que hay que atender en estas circunstancias, no sólo es un cuerpo donde se producen los fenómenos de enfermedad y de muerte, sino que también es alguien que se interpela por lo que le ocurre, los por qué y los para qué. Estas preguntas, para las cuales no hay respuesta precisa y menos aún regida por protocolo alguno y a las que los equipos profesionales nos enfrentamos día a día cuando pacientes y familias nos interrogan por ellas… ¿sabemos cómo atajarlas y acompañar a la persona en el tránsito de descubrir sus propias respuestas para encontrar un sentido y un significado a lo que le ocurre?
La literatura científica ha proliferado sobre este tema en los últimos años, y el interés es creciente en este sentido; los estudios demuestran que el cuidado de la dimensión espiritual o existencial tiene un impacto positivo en la salud, en personas sanas y en enfermas, brindando en estas últimas la oportunidad de afrontar con mayor resiliencia su enfermedad o el final de sus días, otorgando una mejora en su calidad de vida.
Docente:
Ángela C. López-Tarrida. Doctora en Medicina. Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria. Máster en Bioética. Coordinadora territorial de Andalucía y Canarias de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios. Actualmente, mantiene su actividad como médica asistencial en el Hospital San Juan de Dios del Aljarafe, Sevilla. Ha realizado una tesis doctoral llamada: Cuidando con sentido: la atención de la dimensión espiritual en el entorno clínico, con mención internacional y sobresaliente cum laude por la Universidad de Sevilla.
Objetivo de la sesión:
Sensibilizar a profesionales en la atención de las necesidades espirituales en la asistencia clínica como parte integrante de la humanización de los cuidados.
Contenidos básicos:
- Conocer qué es espiritualidad, su interés y su fundamentación en el cuidado de la salud.
- Reconocer la importancia de identificar las necesidades espirituales en pacientes y sus familias.
- Vincular esta dimensión a la práctica profesional como ítem de calidad .
Fecha: martes 2 de abril de 2024.