Las siguientes recomendaciones le pueden resultar de utilidad:
- Comparta su dolor. Busque y acepte el apoyo de otras personas. Identificar qué está sintiendo y expresarlo le ayudará a adaptarse mejor.
- Dese permiso para estar en duelo. Se puede pensar que es mejor evitar el dolor, distraerse con ocupaciones, pero finalmente el dolor saldrá en otro momento.
- Repase los recuerdos agradables y desagradables. Puede ser de ayuda hablar acerca de la persona fallecida, cómo era durante su vida y cómo murió.
- Aplace las decisiones importantes. Puede estar atravesando un momento en que no piense con claridad. Es mejor no tomar decisiones buscando evitar el dolor que más tarde quizá lamente.
- Tómese tiempo. El duelo puede durar entre 1 y 3 años. El trabajo de duelo requiere tiempo y paciencia y no puede hacerse en un plazo de tiempo fijo. Será recomendable una actitud abierta a la evolución de sus emociones que irá experimentando según transcurre el tiempo.
- Preste atención a sus distintas necesidades que irán cambiando con el paso del tiempo. En distintos momentos del proceso de duelo, sus necesidades de apoyo familiar, social o profesional pueden cambiar lo que requerirá de usted la capacidad de escuchar sus necesidades en cada momento para responder a ellas o buscar ayuda.
- No descuide su salud. Durante el duelo somos más susceptibles a sufrir enfermedades. Si padece alguna enfermedad crónica no abandone los cuidados y tratamientos habituales.
- No se automedique. Si necesita tomar algún medicamento para encontrarse mejor o dormir, debe consultar a un médico o médica. Tomar medicamentos “para no sentir” puede contribuir a cronificar el duelo.
- Afronte la rutina. La apatía y el cansancio pueden hacer difíciles las tareas cotidianas, pero éstas son un paso necesario para seguir adelante. Puede ayudar crear una lista de actividades.
- Busque apoyos. En un primer momento, puede ayudar buscar apoyo para las necesidades básicas, ya que incluso las actividades cotidianas pueden suponer una exigencia inasumible en los primeros días. En otros momentos puede ser útil acompañarse de alguna persona para ganar confianza en actividades nuevas. O puede necesitar apoyos puntuales, en forma de confianza o asesoramiento, para asumir alguna responsabilidad de la que antes se ocupara la persona fallecida.
- Dese permiso para descansar, disfrutar y divertirse.
- No olvide que “pedir ayuda profesional no significa debilidad”, y como habitualmente se dice “no es fuerte quién no necesita ayuda, sino quién tiene el valor de pedirla cuando la necesita”.