La verdad se puede decir de manera progresiva, adaptada a la persona y de manera soportable, poco a poco. Informar y adaptar la información a las necesidades de la persona y al momento en la evolución de su enfermedad es la responsabilidad del equipo sanitario.
- Los/as profesionales sanitarios tienen la obligación de indagar si la persona enferma necesita alguna información relacionada con lo que le está pasando y no deben decir nada que la persona no desee conocer. Saben cómo averiguar cuánto y hasta dónde quiere y necesita saber su familiar sobre lo que le está pasando. No tema, adaptarán la información a sus necesidades.
- Confíe y acepte la ayuda del equipo que les atiende en este aspecto. Sabrán cómo y de qué manera ir informando a la persona con enfermedad y a la vez ayudarles a manejar esta situación que tanto temen.
- Si no fuera posible informar al paciente de su proceso de enfermedad, los profesionales sanitarios intentarán que la toma de decisiones se haga de la manera más respetuosa posible para el paciente, sin mentir.