¿Qué es?
La situación que están viviendo puede producir ansiedad (una sensación de opresión, miedo, inquietud…) o tristeza. Son reacciones muy normales en esta situación. Lo importante es que no limiten su vida y que las pueda reconocer para buscar soluciones. De lo contrario pueden influir negativamente en el resto de esferas de su vida e, incluso, aumentar otros síntomas como el dolor o el insomnio.
¿Qué causas tiene o por qué sucede?
En primer lugar, es conocer cuál es el origen de dicha ansiedad o de la tristeza, para buscar la solución más adecuada. El origen será diferente para cada paciente o persona que cuida. Puede estar relacionado con la falta de comunicación, la incertidumbre, el sufrimiento, la pérdida de autonomía, algunos de sus otros síntomas, el miedo al futuro, a ser una carga para la familia…
Algunas recomendaciones…
En cualquier caso, hay algunas recomendaciones que le pueden resultar de utilidad.
- Si la tristeza o la ansiedad están originadas por un mal control de síntomas, lo primero será buscar el alivio de estos.
- Lo ideal es que la comunicación entre paciente y familia o con la red de apoyo sea abierta y sin censuras. Tanto si es paciente como si es persona que cuida o familiar, exprese sus miedos, sus inquietudes, sus dudas…
- Como paciente, es momento de cerrar temas pendientes o buscar solución a aquellos temas que le preocupan.
- Como familiar, debe enfrentar esas conversaciones difíciles con la persona a la que cuida y afrontar la situación que están viviendo. Evitarlas puede llevar al/la paciente a sentir soledad, aun rodeado de personas.
- Puede hacer uso del apoyo de los equipos de atención psicológica. Contacte con su equipo asistencial de referencia si cree que es necesario.
- Evite el aislamiento y la monotonía. Realice actividades placenteras y de entretenimiento adecuadas a sus posibilidades.
- Disminuir la soledad le ayudará en ambos síntomas: busque el apoyo y la compañía de familiares y amistades.
- Intente cuidar su bienestar físico y mental: buscando en confort, realizando ejercicio (si puede), realizando actividades que puedan aumentar su autoestima o técnicas de meditación y/o relajación.
- De salida a la expresión de sus emociones si lo necesita: llorar si le apetece o expresar su ira, su angustia… Desahogarse.
- De forma puntual, puede ser conveniente hacer uso de medicación antidepresiva o ansiolítica, siempre consultando con su médico/a.