El nuevo documento, que ha sido revisado por sociedades científicas, pone el énfasis en la población pediátrica y adolescente, potencia la atención domiciliaria, y favorece la equidad entre el medio urbano y rural
La Consejería de Salud y Familias ha publicado la actualización del Proceso Asistencial Cuidados Paliativos que, en esta tercera edición, ofrece, a partir de una revisión y búsqueda actualizada de la literatura, las nuevas recomendaciones clave de buenas prácticas para mejorar la calidad de vida de las personas que se encuentran en la fase final de la vida, tanto en el caso de población adulta como en niños y adolescentes.
Con ellas, el Proceso Asistencial Integrado de Cuidados Paliativos trata de disminuir la variabilidad de la práctica clínica y conseguir mejorar la calidad de vida de estas personas, y la de sus familias, a través de un abordaje integral, continuado y compartido de los diferentes recursos sanitarios.
Para ello, establece cuál es el conjunto y cronología de actividades, competencias, recursos, y criterios de calidad, que ofrecen la respuesta más adecuada a las necesidades y expectativas asistenciales de la persona y su familia en el momento final de la vida, una situación de especial vulnerabilidad que requiere de la práctica de competencias profesionales específicas y de una atención especialmente humanizada.
La nueva edición del proceso de cuidados paliativos viene a consolidar el modelo de atención sanitaria integral al tiempo que se ajusta a necesidades más actuales, que pasan por potenciar la atención en el domicilio; evitar la desigualdad entre el medio urbano y rural; respetar la autonomía del paciente y fomentar la planificación anticipada de decisiones sobre las preferencias y deseos del paciente sobre cómo deben realizarse los cuidados ante una situación de enfermedad terminal. Además, el nuevo proceso pone especial énfasis en la atención de cuidados paliativos que se ha de ofrecer a la población pediátrica y adolescente.
Entre las mejoras del proceso asistencial, hay que destacar una mayor homogeneidad y especificidad en la metodología de identificación y valoración de las necesidades de cuidados paliativos de los pacientes por parte de los profesionales sanitarios. Junto a ello, la incorporación de una nueva herramienta de diagnóstico de la complejidad para las personas adultas, así como de las situaciones de complejidad en niños y adolescentes, que contribuyen a una gestión más eficiente de los recursos avanzados implicados en la atención al final de la vida. Además, entre los recursos de cuidados paliativos se incluye la Plataforma de Telecontinuidad que facilita la continuidad asistencial en el domicilio de los pacientes.
En este proceso de actualización han participado 16 profesionales sanitarios de distintas áreas y especialidades, dado el enfoque integral que requiere este tipo de atención que se produce en un momento especial de la vida, así como revisores externos de reconocido prestigio procedentes de más de una decena de asociaciones y sociedades científicas.
El proceso asistencial integrado, disponible en la web de la Consejería de Salud y Familias (https://www.juntadeandalucia.es/organismos/saludyfamilias/areas/calidad-investigacion-conocimiento/gestion-conocimiento/paginas/pai.html), se enmarca en el Plan de Cuidados Paliativos, el instrumento con el que Andalucía cuenta desde 2008 para proporcionar una atención adecuada e integral a las necesidades físicas, emocionales, sociales y espirituales de las personas que se hallan en situación terminal, y de sus familiares, procurándoles el máximo grado de bienestar y calidad de vida posibles, siempre dentro del respeto a la dignidad y voluntad personal en el último periodo vital.
Información publicada en: https://juntadeandalucia.es/organismos/saludyfamilias/actualidad/noticias/detalle/214470.html